Como ya te hemos contado en alguna ocasión, lo primero que se debe hacer es calcular la cantidad de pintura que se va a necesitar por metro cuadrado. De esta manera, comprarás únicamente la pintura que vayas a utilizar. Algo que agradecerá tanto tu bolsillo, como el medio ambiente, pues estarás consumiendo de forma responsable y generando una menor cantidad de residuos.

Para realizar este cálculo, no tengas en cuenta únicamente la superficie a pintar, sino también el rendimiento del producto porque cada pintura ofrece un rendimiento diferente.

Cómo ahorrar pintura

La calidad de las pinturas que elijas también es importante. Aunque a priori pueda parecer un gasto, lo barato sale caro. Las pinturas de calidad garantizan una mayor y mejor cubrición. Es decir, necesitarás menos cantidad para la misma superficie.

Aunque te cueste creerlo, el color que selecciones también puede influir en el ahorro. No porque un color sea más caro que otro, sino porque la cubrición no es la misma para todos los tonos. Generalmente, los colores intensos son menos cubrientes, por lo que se recomienda preparar la superficie previamente con un fondo o imprimación.

Y éste es otro de los consejos para ahorrar pintura, aplicar antes una capa de imprimación. La imprimación iguala la absorción de pintura, protege, sella los poros y mejora la adherencia. De esta manera, se evita también que la pintura se deteriore antes de tiempo, garantizando un acabado profesional.

Tanto la técnica que emplees para pintar como los materiales que elijas repercuten en el gasto. Utiliza brochas y rodillos indicados para el tipo de superficie a pintar y en buen estado. Así, podrás sacar el máximo rendimiento al producto.

Si tienes alguna duda, ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos encantados a resolverla.